El padre Marcelo Barrionuevo, vicario de la Fe y la Cultura del Arzobispado de Tucumán, definió a Paz Posse como “un hombre de bondad, que siempre estuvo disponible para el bien común. Javier tenía una clara conciencia cristiana. Un hombre de corazón noble y bueno, con criterios humanos y cristianos consolidados en la formación de su hogar”, manifestó.
“La iglesia, en el pensar del señor arzobispo, monseñor Alfredo Zecca, siente profundamente la pérdida de Javier. Cuando lo conoció, vio que podía confiarle el área más sensible de la iglesia como es Cáritas”, expresó Barrionuevo.
También lo recordó, muy emocionado, Miguel Jiménez, ex director de Cáritas. “Javier era abogado, pero siempre puso por encima de su profesión la necesidad de ayudar a los demás. Lo recuerdo como una persona humilde, de mucha entrega”, describió.
Paz Posse tenía 48 años. También fue presidente de la Fundación Banco de Alimentos de Tucumán. Le gustaba hacer largos paseos al aire libre. Precisamente perdió la vida al caer de un caballo hoy a la mañana. Según informó la Policía, luego del percance fue traslado de urgencia al hospital Padilla, adonde llegó sin vida.